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Después de un largo viaje, Leticia, Alfonso, Juan Carlos y yo (Irene) llegamos a Salamanca, lugar de destino donde íbamos a pasar un día turístico, acompañado de una noche de fiesta. Lo primero que vimos nada mas llegar fue el Puente Romano, por debajo del cual fluyen las aguas del río Tormes. Este puente data del S.I y se le atribuye a Trajano. Tiene 26 arcos aunque solo quedan 15 de la construcción originaria, en la margen derecha, ya que hubo una gran riada que destruyo los 11 arcos y tuvieron que ser restaurados.

Lo primero que hicimos fue buscar el Hotel donde se alojaron Alfonso y Juan Carlos, situado en el centro histórico de Salamanca, a pocos metros de la Plaza Mayor. Después dejamos el coche enfrente de esta obra del año 1524, La Iglesia de Dominicos de estilo plateresco en cuyo interior destacan obras Barrocas, como los retablos y las pinturas murales. El retablo mayor es el primero de los hermanos Churriguera en Salamanca.

Después, cuando la marea de gente nos dejo salir de la Plaza, buscamos una discoteca donde poder estar a gusto y allí nos quedamos. Aquí mostramos una foto de una de las calles de fiesta mas transitadas en la noche salmantina. Pedimos disculpas por la mala calidad de la foto pero queremos mostrar la cantidad de gente que había aglomerada en esa sola calle.

Tras una larga noche decidimos que era la hora de terminar la NocheVieja Universitaria, donde nos volvimos a separar.

A la mañana siguiente Alfonso y yo (Juan Carlos), tras desayunar, decidimos volver a Madrid, haciendo  una breve visita en Ávila.

Mientras que nosotras (Leticia e Irene) fuimos a dar una vuelta, aunque fue muy corta ya que el viento nos hizo imposible andar. 

Por la tarde fuimos a ver la ciudad, lo que nos fue también imposible porque diluviaba, como se puede observar en la foto que nos hicimos junto al Palacio de Monterrey del S. XVI. Pero como era muy incomodo hacer las fotos con la lluvia decidimos que la mejor opción era visitar La Sureña.

Después de La Sureña fuimos a una conocida zona de Salamanca, llamada Van Dick, donde se tapea a buen precio, está pensado para los estudiantes. Y por último visitamos un bar donde nos tomamos la última y de camino a casa pasamos por la Plaza Mayor, decorada con un bonito belén.



El sábado el tiempo nos permitió ver Salamanca y visitamos lo más importante, ya que en un día tampoco se puede ver toda Salamanca. Comenzamos por la famosa Casa de las Conchas, que realmente es un palacio gótico del S. XV-XVI. Las conchas son el principal motivo decorativo de la fachada, para rememorar la Orden de Santiago. La leyenda cuenta que Maldonado escondió un tesoro debajo de una de las conchas.
Hoy en día se usa como biblioteca pública.

Pontificia

Justo enfrente de este monumento se encuentra La Clerecía, edificio barroco del S. XVIII, el cual se utiliza como sede de la Universidad Pontificia (privada) de Salamanca como mostramos en la foto, aunque solo pudimos ver el exterior.

Después caminamos por la Rua hasta la Catedral Nueva, que como ya han contado nuestros compañeros su mayor atractivo es el de estar unidad a la Catedral Vieja. Como es tradición, Leticia tuvo que encontrar al astronauta y después tocar al conejo de la suerte. Como se ve en la foto logró encontrar todo, sin ayuda.

Anaya Exterior

Anaya interior

En frente se encuentra la plaza de Anaya, donde se encuentra el edificio que la da nombre, el Palacio de Anaya. Hoy se usa como facultad de filología por lo que pudimos entrar y contemplar su belleza.

Escuelas Mayores

Desde este punto nos dirigimos a la conocida Universidad de Salamanca. Lo más emblemático es encontrar la famosa rana de Salamanca encima de la calavera, situado todo esto en la fachada plateresca.

Patio de las Escuelas

Frente a la Universidad de encuentran las Escuelas mayores  y dentro se encuentra el Patio de Escuelas.


Después de ver esto, habíamos terminado de ver lo más importante del centro así que decidimos andar hasta  las afueras, para visitar otros lugares emblemáticos de la ciudad.
Visitamos la Iglesia de San Polo, aunque de la originaria,  en la actualidad, quedan muy pocos restos ya que se ha construido un Hotel encima.

Entrada a la Torre

Vistas de la Torre

Desde la Iglesia de Son Polo nos dirigimos a la Cueva de Salamanca o Cripta de San Cebrián. Lo que ahora es una cueva en el S. XII fue una cripta subterránea de un templo barroco, la Iglesia de San Cebrián. Su  construcción estuvo condicionada por la antigua muralla y además cuenta con una leyenda. Se decía que Satanás, bajo la apariencia de sacristán, impartía sus doctrinas sobre las ciencias ocultas. En el mismo espacio se encuentra también la Torre del Marqués de Villena, aunque nunca le perteneció. El nombre lo recibe porque Enrique de Aragón fue un alumno que engañó a Satanás a cambio de perder su sombra. La Torre está apoyada en la Cerca Vieja -antigua muralla- y es lo único que queda de lo que fue el Palacio Mayorazgo. La imagen de la derecha muestra las cuatro vistas desde lo alto de la Torre.



Después nos acercamos a ver el Huerto de Calisto y Melibea, en cuanto al arte no tiene nada destacable ya que se inauguró en 1981, pero es uno de los espacios verdes más bellos de Salamanca. Y por último nos quedaba ver la Catedral vieja y todas sus fachadas románicas. 






Otro lugar que hemos visto es la Iglesia de la Purísima, situada en frente del Palacio de Monterrey, quien encargó la construcción. De su exterior destacan la fachada y la espectacular cúpula como se ve en la foto.
Como se puede ver, en todas las imágenes, hemos puesto por detrás la Catedral de Salamanca, tanto la Nueva, como la Vieja.
Es algo muy característico, ya que desde cualquier punto de la ciudad se ven Las Catedrales y desde nuestro punto de vista es lo mas mágico. 

Decir que fue un viaje muy aprovechado donde pudimos ver tanto la gran ciudad artística y turística que es Salamanca como su fiesta universitaria. 

Agradecerle a Silvia que nos dejara su casa y sobre todo por hacer de guía y fotógrafa. Y por último invito a todo el mundo que aún no haya visitado Salamanca a hacerlo.